Cuando has pasado tu infancia disfrutando de los veranos en el pueblo se crea un vínculo tan fuerte con él, con sus habitantes, con sus calles que, sin saber cómo, se quedan para siempre tatuados en tu corazón.
Y supongo que ese es el motivo por el que, inexplicablemente, una parte de mí se molesta cuando derriban casas que siempre estuvieron ahí, que son testigos mudos de mil secretos y aventuras y que de repente, se convierten en escombro llevándose entre sus piedras una pequeña parte de mí. Es como si se borrasen mis recuerdos más tiernos, como si se fuesen diluyendo entre los colores intensos de las nuevas fachadas. Y me entristezco porque así no me dejan mostrarle a mi hija cómo eran las cosas cuando yo era pequeña, me cambian el decorado…
Por eso me ha parecido tan deliciosamente entrañable “Casas con Vida”. ¡Hasta el nombre es bonito! Un precioso proyecto que realizaron hace unos años en Fresnedillas de la Oliva (Madrid) y que ha transformado casas abandonadas o semiderruidas en el hogar que un día fueron, devolviendo de alguna manera a la vida a sus propietarios y sus costumbres.
Convencer a la hija del barbero para que salga a jugar contigo, oler el pan recién salido del horno, acariciar al perro del bodeguero, llevar la comida a la cuadra de los animales… así hasta 26 casas devueltas a la vida por el maravilloso trabajo de Elena Parlange, una ARTISTA en mayúsculas, un hada buena que ha hecho magia con sus pinceles desempolvando historias que ya no se podían apreciar entre tanta ruina. Ella ha sabido escuchar lo que las paredes le contaban, respetar el pasado del pueblo y mantener ese halo vintage tan bucólico en su obra que os enamorará a todos.
Estamos viviendo una realidad tan dolorosa que necesito seguir buscando planes, creando buenos momentos a la espera de poder disfrutarlos intensamente con mi familia. Y sin duda, éste será uno de los primeros a realizar este verano en cuanto volvamos a la nueva normalidad.
Y si siempre me ha parecido una gran idea descubrir los pueblos de España, ahora que el turismo nacional se ha quedado tan necesitado de nuestra ayuda, estoy segura de que esta escapada que os propongo será la manera perfecta de volver también nosotros a la vida; sin aglomeraciones, descubriendo tesoros escondidos en nuestros pueblos, rodeados de la belleza del pasado y sanando heridas con pequeñas dosis de nostalgia de tiempos mejores ¡#YoMeQuedoEnEspaña!
Os dejo aquí un plano de la ruta alrededor del pueblo para que la hagáis a vuestro ritmo. Y para que les guste más todavía a los pequeños, pueden ir realizando el juego de pistas que se propone para que observen las pinturas con más detalle y se diviertan mientras disfrutan de este museo al aire libre que además es gratuito.
No os extrañe que una de las fachadas esté dedicada al espacio y es que Fresnedillas tuvo un papel fundamental en la llegada del hombre a la Luna ¡Sí, sí como os lo digo! Desde aquí se informó a la tripulación del Apolo 11 que le quedaban menos de 30 segundos de combustible para alunizar. Ésta y muchas otras curiosidades las podréis encontrar en el interesantísimo Museo Lunar del pueblo, que podría poner un broche de oro a la visita.
Ya me diréis qué sensaciones se asomaron a recibiros desde las Casas con Vida de Fresnedillas de la Oliva.
¿Consideras que este tipo de turismo no es el tuyo? ¡Puede ser! Hay tantas formas de viajar como personas. Pincha
Casas con vida
El paseo que necesitas para volver a sonreir